NUNCA FUE TARDE
Nunca es tarde para soltar esos apegos innecesarios, superfluos, redundantes, sobrantes y todos sus sinónimos. El amor malsano es como veneno de serpiente letal y ofensivo, solo le bastan 5 minutos para destruirte. Nunca es tarde para irse, tal vez es solo un imaginario cuando mencionas esas “personas” que frustran tus recuerdos, que se meten en tu cabeza por días enteros. Desayunan, almuerzan y comen allí, en esos espacios que solo la mente crea para joderte la vida. Vuelves a creer y revivir esas palabras de cajón utilizadas por los entusados como: “voy a vivir con las ganas de quererte, pero es que quererte me hace mal, me hace mucho daño” De la nada los lazos se rompen, los sueños se destruyen, las promesas se disipan y el amor se acaba, es insoportable superar un momento que te arranco los sueños, pensar en todo lo que quisimos ser, ¿Ya para qué?, tu amor es nulo, carente de valor, ausente de mis deseos, nunca pertenecí a ti, no está...